Presentar las condiciones de uso, de envío y garantía de forma clara, comprensible y fácilmente accesible.
Una gestión transparente aporta confianza y seriedad a nuestra tienda virtual. El cliente debe sentir que está comprando en un sitio serio y formal, con un NIF o un CIF que lo identifique y que le permita reclamar en caso de problemas. Además de esto también es recomendable tener una sección que explique paso a paso desde como registrarse en tu web, hasta realizar la primera compra.
Ofrecer al cliente diversas formas de contacto y soporte a la venta.
Un formulario de contacto, una cuenta de Twitter o Facebook o un chat online. Debemos interactuar con nuestros clientes, escucharlos y responder sus dudas, atender su sugerencias si son buenas. La interacción es buena y positiva.
Permitir comentarios en los productos.
La parte social del comercio electrónico tiende a crecer. La opinión de otro cliente sobre un producto puede ayudar a otro a decidirse a comprarlo. No hay que tener miedo de que los clientes expresen su punto de vista sobre un producto. Incluso puede ayudarnos a identificar productos que sería mejor no vender.
Conéctate a la Web 2.0
Create una página de fans en Facebook o una cuenta en Twitter, donde puedes aportar valor a tus productos o promociones, de una manera fácil y así llegar a un mayor público al potenciar el efecto “boca a boca” de las redes sociales. Además en la web de fans de Facebook, los clientes pueden interactuar contigo y añadir comentarios (buenos o malos depende de tu servicio) que se traducen en una mayor confianza de otros clientes, a la hora de realizar compras en tu web.
Ofrecer información relevante sobre los productos que vende la tienda online.
Nombrar los puntos básicos que definen al producto y su funcionalidad. El cliente debe tener claro qué hace y qué no hace el producto que se dispone a comprar. Una información resumida y detallada, que se centre en lo importante, demuestra que controlamos el producto y que sabemos lo que vendemos.
Potenciar los productos relacionados
Es bastante probable que a una persona que compra un vestido le pueda interesar también unos zapatos o pendientes a juego. En eso consiste los productos relacionados que tendrás que ofrecer (de manera sutil, pero que se vean) en las propias fichas del producto principal.
Ofrecer diversas alternativas de pago.
Por transferencia o ingreso bancario, por TPV virtual, por PayPal, contra reembolso, etc. A la hora de pagar debemos facilitar la tarea al cliente. Muchas compras online no se producen por incomodidad a la hora de realizar el pago.
Promociones
¿Qué es de una tienda sin promociones? No te quedes en los gastos de envío gratis, puedes añadir compensaciones por recomendar un nuevo cliente, ofertas 2×1, bonos descuento (con fecha de caducidad para que tengan que ser usados), beneficios por enlazar con tu tienda…etc.
Cuida tus clientes
Es importante que a los clientes de nuestra tienda los cuidemos a lo largo del tiempo. Podemos enviarles newsletters personalizadas con ofertas o descuentos, descuentos en sus cumpleaños, tarjeta de regalos, posibilidad de participar en sorteos dentro de la web, etc
Tener en cuenta estos detalles os ayudará a conseguir una tienda online optimizada y sobre todo que venda.